Conversación con una
Hermana de María de Schoenstatt en Suiza
¿Por qué te hiciste Hermana de María de Schoenstatt?
Hna. M. Joseline Becchio
«A la pregunta: «¿Por qué quieres unirte a nuestra comunidad?», respondí: «Porque creo que éste es el camino que el Padre ha planeado para mí. Quiero ponerme enteramente a disposición de la Obra de Schoenstatt». Cuando miro hacia atrás, me asombra que realmente haya podido comprometerme directamente con la Obra de Schoenstatt como Hermana del Movimiento durante muchos años. Sí, el Padre había planeado este camino para mí».
Hna. Ursula-Maria Bitterli
«Antes de ingresar, escribí: «Quiero ser Hermana de María para estar disponible para Dios y los hombres». Esto resultó ser cierto, entre otras cosas porque tuve casi continuamente tareas en las que tenía contacto directo con la gente, especialmente en el Movimiento y la Virgen Peregrina. Poco antes de entrar, vi desde mi habitación a una mujer caminando con sus hijos. Esto me conmovió mucho, porque me di cuenta de que nunca tendría hijos y me eché a llorar. Sin embargo, extrañamente, esto se me pasó después, tal vez fue una gracia, y no volví a entristecerme por ello. Como Hermana de María, no podía estar sólo para seis «niños», como habíamos acordado una vez mi amiga de la guardería y yo, sino para muchos más».
Hna. M. Selina Hardegger
«Seguir a Jesús a tiempo completo. Estaba muy involucrada en la iglesia».
Hna. M. Paula Tschirky
«Pertenecer a Jesús completamente era importante para mí, servir a Dios y a la gente en la vida diaria».