El 18 de octubre de 2007 comenzó una nueva etapa de la historia de
Schoenstatt en Kerala,
al sur de India. Por primera vez las Hermanas enviamos doce santuarios peregrinos. Entre tanto hay ya 305 santuarios peregrinos que visitan regularmente a las familias.
Incluso se envió uno a Rusia, otro peregrina por Londres y cuatro santuarios peregrinos están en los Estados Árabes del Golfo. Todos estos santuarios peregrinos visitan a personas del sur de India que estudian o trabajan allí. La Santísima Virgen se acredita como MADRE admirable en todas las intenciones de estas personas.
Algunos ejemplos que lo manifiestan:
Cierta vez llegó una familia con un pedido muy grande. Su hija estaba casada hacía doce años con un médico y no tenían hijos. Habían hecho todo lo posible por tenerlos, pero sin éxito. Sus padres nos pidieron entonces nuestra oración. Trajeron una enorme vela que pesaba 50 kilos y la encendieron en el santuario. Se propusieron participar nueve veces de la santa Misa de Alianza y mover a la Santísima Virgen a que intercediera por su hija. La Santísima Virgen no los hizo esperar mucho. En la segunda Misa de Alianza nos contaron llenos de alegría que su hija estaba embarazada. Ellos creen firmemente que se debe a la intercesión de la Santísima Virgen María. Los padres perseveraron en su propósito y participaron de la Misa de Alianza cada 18 de mes, rezando por un buen nacimiento. La hija dio a luz una niña.
Los padres también tenían problema para poder entrar a Londres. La Santísima Virgen intercedió también por esto y todo sucedió sin percances. Los padres están muy impresionados por todo esto y quisieron que se publique. Y lo publicamos para las demás familias.
Sus parientes también se enteraron de estos hechos. Entre ellos había un matrimonio que estaba casado hacía cinco años y no tenían hijos. También nos transmitieron a nosotras esta intención, y un mes después la mujer quedó embarazada, dando luego a luz una niña. Escribí ambos testimonios en nuestra circular, y entonces llegaron de todas partes llamados pidiendo que rezáramos por hijos para distintos matrimonios.
La esposa de un sacerdote hindú escuchó de su vecina, una cristiana, acerca de estas oraciones escuchadas. Quiso entonces recibir ella también el santuario peregrino. La vecina debía pedirme el permiso y posibilitarlo. Naturalmente dí el permiso con mucho gusto. La cristiana le aseguró que, el año siguiente, por esta época, iba a tener un hijo. Era el tiempo del Adviento. Ellas rezaron juntas, y: el 8 de diciembre esta señora dio a luz una niña. Pero la señora tenía miedo de mostrarme la niña porque creía que yo la convertiría en cristiana. Entonces no visité a la niña. Lo principal es que la niña nació. Pero más tarde sí me la mostró.
Y vino una vez más con este pedido, refiriéndose a su hermano. En este caso la Santísima Virgen bendijo doblemente: recibieron mellizos.
El santuario peregrino a los Estados Árabes del Golfo
Una señora le tomó tanto cariño a la Santísima Virgen que la llevaba siempre consigo a todas partes donde iba. Y tuvo la oportunidad de visitar a sus hijos en los Estados Árabes del Golfo, pero esto la puso en un dilema: ¿Qué hacer? No quería dejar sola en la casa a la Santísima Virgen y dársela a otros no le convencía. Entonces decidió llevar consigo el santuario peregrino. Pero llevar el santuario peregrino a los Estados Árabes del Golfo no es nada fácil: a veces, al entrar allí se retiene la imagen, se le quita la cruz, etc. Por eso esto era un riesgo. La señora no quería colocar el santuario peregrino en el equipaje y así se decidió a llevarlo consigo, en sus manos. Pasó sin problemas por todos los controles. Ella está convencida de que la Madre de Dios misma lo hizo posible.
Visitó a sus hijos y estaba muy feliz. Cuando se manifestaron problemas de salud fue al médico, el cual constató que ella tenía cáncer, y esto desde hacía siete años. La señora cree que le debe a la Santísima Virgen que esto ahora se haya descubierto. Luego recibió un tratamiento, todo salió bien y ahora está sana. Ella está firmemente convencida de que fue la Santísima Virgen la que tomó todo en sus manos, intercedió por ella y la sanó.
Yo podría contar cientos de ejemplos.